Complementos alimenticios

La mayoría de la gente piensa que los complementos alimenticios son un invento de los últimos años. Es verdad que los productos que se llaman así aparecieron relativamente recientemente, a finales del siglo XX. Pero los suplementos dietéticos como tales tienen sus raíces en un pasado lejano. Eran conocidos y utilizados incluso antes de nuestra era.

Al buscar plantas y raíces comestibles, nuestros antepasados notaron que algunos de ellos tuvieron un efecto especial en el cuerpo. Por ejemplo, descubrieron que el jengibre ayudaba a tratar la tos y el beleño aliviaba el dolor. Siglo tras siglo, la gente seguía descubriendo nuevas propiedades de plantas y sistematizando los datos.

¿Quién inventó complementos alimenticios modernos?

El suplemento dietético tal y como lo entendemos hoy fue inventado por el químico estadounidense Carl Rehnborg. Cuando era joven, tenía mucha pasión por la alimentación sana y leía todo lo que podía encontrar sobre vitaminas, oligoelementos y plantas medicinales. Más tarde los conocimientos le salvaron la vida. 

Cuando trabajaba en China en la década de 1920, el gobierno del país se cambió, y le metió en la cárcel. Las condiciones en la prisión dejaron mucho que desear. Y un día Rehnborg decidió que era hora de aplicar sus conocimientos de nutrición sana. 

Primero, el químico decidió reponer las reservas de hierro del organismo: tomó clavos oxidados y comenzó a agregar sus virutas a la comida. Luego pidió al personal que le trajera plantas recolectadas fuera de los muros de la prisión.

En 1927, fue excarcelado y volvió a los Estados Unidos donde inventó los primeros complementos alimenticios. Al principio, ofrecía sus productos de forma gratuita, pero nadie demostró ningún interés. Y cuando decidió venderlos, los clientes empezaron a hacer colas para comprarlos.

Entre medicamentos y alimentos

En esencia, los suplementos dietéticos son un vínculo intermedio entre los alimentos y los medicamentos. Por un lado, deben tomarse regularmente al igual que vitaminas y se venden en forma de pastillas y cápsulas como medicamentos. Por otro lado, los complementos alimenticios casi no tienen ningún efecto terapéutico y no se pueden usar para tratar enfermedades graves. Al mismo tiempo, en caso de enfermedades crónicas, pueden aliviar la afección e incluso ayudan a evitar recidivas.

¿Cómo se recomienda tomar complementos alimenticios?

Los suplementos de ninguna manera sustituyen a los medicamentos. Antes de comenzar a tomarlos, consulta a tu médico, especialmente si tienes más de 60 años o si estás embarazada o amamantando. Además, ten en cuenta lo siguiente:

• no se recomienda tomar 2 o más suplementos diferentes al mismo tiempo, ya que pueden ser incompatibles y causar reacciones alérgicas;
• evita tomar productos que contienen ingredientes nuevos, exóticos y poco conocidos;
• cómpralos sólo en tiendas y farmacias confiables.

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